ACTIVIDAD FÍSICA Y NEUROGÉNESIS
Un estilo de vida saludable, incluyendo ejercicio físico regular, se cree generalmente eficaz para mejorar la función cognitiva y mejorar la neurogénesis. Tales efectos inducidos por el ejercicio físico están asociados con una mayor expresión cerebral de factores neurotróficos y de crecimiento.
Sølvsten CA, de Paoli F, Christensen JH, Nielsen AL
ACTIVIDAD FÍSICA, DEPRESIÓN Y ANSIEDAD
El ejercicio induce respuestas beneficiosas en el cerebro, que se acompaña de un aumento en el BDNF, un factor trófico asociado con la mejora cognitiva y el alivio de la depresión y la ansiedad.
Actividad física, inteligencia y memoria
Efecto agudo del ejercicio físico en la inteligencia y la memoria en hombres, según la edad.
ACTIVIDAD FÍSICA Y EFECTOS PSICOSOMÁTICOS
- Efectos psicosomáticos positivos:
- Efecto tranquilizante.
- Efecto antidepresivo.
- Efecto euforizante.
- Efecto analgésico: adaptación al dolor.
- Tiempo de reacción y tiempo de movimiento más rápido.
- Efectos psicosomáticos negativos:
- Abuso de ejercicio.
- Stress en el deporte de competición.
- Deporte y agresividad.
Fominaya Gutiérrez J., Orozco Perals Ma Mar
ACTIVIDAD FÍSICA Y PARÁMETROS DE ADAD BIOLÓGICA
En cuanto a la función respiratoria, el ejercicio mejora la ventilación pulmonar y la potencia inspiración-espiración.
El ejercicio también contribuye a “mantenerse en forma”, lo que incluye un efecto favorable sobre “la capacidad de reacción ante un estímulo, o tiempo que se tarda en reaccionar”.
Preservación de la masa y fuerza muscular.
Mejora de la salud mental y del sistema inmunológico.
La actividad física contribuye a conseguir un “envejecimiento con éxito”.
Los datos sugieren que la práctica regular del ejercicio tiene un efecto “rejuvenecedor” sobre la edad biológica, que predice más exactamente la probable longevidad con preservación de las funciones fisiológicas (y consiguiente calidad de vida) que la edad cronológica.
ACTIVIDAD FÍSICA Y LONGITUD TELOMÉRICA
La influencia de la actividad física (PA) y la aptitud física (PF) en edades más avanzadas sobre los cambios en la longitud de los telómeros (TL) – secuencias de ADN repetitivas que pueden marcar el envejecimiento biológico – no está bien establecida. Pocos estudios previos (principalmente transversales) se han realizado en adultos mayores, y pocos estudios han evaluado PF.
Soares-Miranda L, Imamura F, Siscovick D, Jenny NS, Fitzpatrick AL, Mozaffarian D
El mayor impacto se observó en los deportes de actividad intensiva. El efecto se observa con períodos más largos de actividad física (al menos 10 años), con actividades deportivas intensivas que tienen el mayor impacto en rLTL. Nuestros datos sugieren que la actividad física regular durante al menos 10 años es necesaria para lograr un efecto sostenido en rLTL.
Saßenroth D, Meyer A, Salewsky B, Kroh M, Norman K, Steinhagen-Thiessen E, Demuth I
EJERCICIO INTENSO Y SÍNDROME METABÓLICO
Investigadores de la Clínica Universidad de Navarra es que, para la población estudiada (más de 10.000 adultos), el riesgo de sufrir lo que se conoce como síndrome metabólico es un 37% menor entre quienes realizan un ejercicio vigoroso o intenso frente a los que lo hacen ligero.
American Journal of Preventive Medicine .2017.52(4).95-99
Se dice que una persona tiene ese síndrome cuando sufre tres de las cinco siguientes condiciones: glucosa o tensión alta, colesterol HDL bajo, triglicéridos alto u obesidad (medida por el perímetro de la cintura). Este conjunto de situaciones es un determinante claro de riesgo cardiovascular y de diabetes tipo II.
¿QUÉ ES EL EJERCICIO INTENSO?
Para saber exactamente a qué se refieren cuando hablan de ejercicio ligero, moderado o intenso, los especialistas usan una medida: el MET, que equivale al gasto energético de un adulto de 70 kilos sin moverse. Se denomina así porque ese consumo se debe al metabolismo basal, al de las funciones que no se paran nunca: lo que consume la circulación, los procesos celulares, la respiración, etcétera.
De acuerdo con esta escala, la Organización Mundial de la Salud divide el ejercicio en leve (un consumo de menos de 3 MET a la hora), moderado (de 3 a 6) e intenso (más de 6 MET).: caminar a paso muy rápido supone unos 4,5 METS como máximo; hacerlo suave, 2,5. La natación (40 minutos) se traduce en unos 6 METS, jugar un partido de fútbol 7 METS, trotar (a 8 kilómetros por hora, lo que supone 7,5 minutos el kilómetro) 8 METS y el atletismo, como por ejemplo, correr a 5 minutos el kilómetro, alrededor de 12 METS. La conclusión científica, es clara: para mantener el corazón sano, es más importante la intensidad del ejercicio, que su duración.
Alfonso Soler Gomis